Mis inicios
Cuando comencé a practicar este deporte comprendí que no es solo un viaje a la montaña sino también un viaje hacia nuestro yo más profundo. Tener la valentía de correr conmigo misma fue uno de los logros más lindos que me dio el Trail.
Claro que surgieron preguntas en el recorrido, pero fueron preguntas que luego transformé en hermosas experiencias y que me llevaron a conectar con mi lado creativo combinando la escritura con el Trail Running.
Practicar este deporte, lo describo como una escuela de vida y la montaña, la mejor maestra: subís y bajas, si te caes te volvés a levantar. Aprendés a descansar en tu ritmo acompañando cada paso con cada latido.
Lo más enriquecedor del Trail
Este deporte tiene el «plus» de enseñarte a través de su práctica, acciones valiosas para la vida:
- Conectar con la naturaleza
Estar en contacto con la naturaleza te enseña que algo tan simple y cercano como el presente es lo único y lo más valioso que existe.
- Aventura asegurada
Correr por las montañas siempre da lugar a la incertidumbre, a la duda, a lo imprevisto. Es una aventura continua que te da la oportunidad de reinventarte en todo momento.
- Es una fuente de vivencias
De esas que dejan huellas en el alma, porque ningún corredor es el mismo cuando cruza el arco de llegada.
- Te encamina hacia el autoconocimiento
Conocerte, sentirte y escuchar tu cuerpo. Tener consciencia de él, alimentarlo y entrenarlo. Es tu hogar, tu templo.
- Fortaleza mental
Entender que el cuerpo hace lo que la mente le dice. Desarrollar la mente para tener habilidades y herramientas para afrontar las adversidades y así lograr la fortaleza mental.
En cada entrenamiento y en cada carrera, este deporte te enseña éstas y muchas lecciones más que ayudan a forjar tu carácter como persona y como deportista. La clave está en saber escuchar(se) y aprender en el proceso para seguir creciendo y mejorando día a día.
¡El Trail Running es una aventura que te está esperando para ser vivida!

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